23 pero considerando que también mi padre, con ocasión de salir a
campaña hacia las regiones altas, designó su futuro sucesor,
24 para que, si ocurría algo sorprendente o si llegaba alguna noticia
desagradable, los habitantes de las provincias no se perturbaran, por saber
ya a quién quedaba confiado el gobierno;
25 dándome cuenta además de que los soberanos de alrededor,
vecinos al reino, acechan las oportunidades y aguardan lo que pueda
suceder, he nombrado rey a mi hijo Antíoco, a quien muchas veces, al
recorrer las satrapías altas, os he confiado y recomendado a gran parte de
vosotros. A él le he escrito lo que sigue.